El desesperado reclamo de una jubilada estafada; le cobran un préstamo que no sacó
La mujer tiene 68 años y percibe una jubilación mínima. Le vaciaron la cuenta bancaria y le gestionaron un crédito de $261 mil que no puede pagar, y por el cual la pusieron en el Veraz. El Banco Supervielle “no pretende hacerse cargo”.
En los últimos meses empezaron a llover las denuncias por estafas virtuales que apuntan al Banco Supervielle. Las víctimas deciden hacer público sus casos porque no reciben respuestas de la casa crediticia. Quienes cometen estos delitos no discriminan entre género ni edades para sacarles la plata detrás de una plataforma digital.
Rosa tiene 68 años y cobra su jubilación a través del banco Supervielle, en la ciudad de San Luis. El 12 de agosto del 2020 recibió un llamado en el cual le informaron que eran del ministerio de la Nación, en conjunto con el ministerio de Salud.
“Nos dijeron que a mi mamá le correspondía el bono IFE de $17 mil y que teníamos que ir hasta el cajero para poder retirar la plata”, contó Vanesa su hija, en declaraciones a El Chorrillero.
Entonces se dirigió a la sucursal del Banco para realizar la transacción: “En ningún momento le di la clave, ni el número de tarjeta, lo que sí me hicieron es generar una clave token y me dijeron que tenía que esperar que ya me iban a depositar la plata”.
Los estafadores le informaron que dentro de tres horas iban a ver impactado en su cuenta el dinero. Cuando fue a chequear le habían depositado $21 mil y no $34 mil que era lo acordado.
“Cuando me llamaron hice el reclamo y me comunicaron que se habían equivocado y que al otro día ya iba a tener todo en regla”, señaló la mujer que también sufrió el robo en su cuenta, pero en otro banco.
En su caso explicó que cuando fue a ver a controlar se encontró con la sorpresa que la tarjeta estaba bloqueada: “Me fui al banco en donde soy cliente y me informaron que tanto mi mamá como yo habíamos sido estafadas”.
Desde ese momento comenzaron a reclamar. Pero un año y cinco meses después el banco Supervielle “no se hace cargo” por las 60 cuotas de $15.660 de un crédito que nunca pidieron. Como consecuencia la jubilada ya se encuentra en el Veraz
“Comenzamos con la denuncia correspondiente después, la denuncia al Juzgado Federal porque es un delito a nivel nacional. Nos llamaron a declarar, en ese momento estábamos sin abogados por el costo altísimo que cobraban así que estuvo parado hasta el año pasado que conseguí uno”, puntualizó Vanesa.
Pese a que Rosa nunca sacó, ni autorizó dicho crédito, desde un estudio jurídico que se pronuncia en nombre de la entidad “la acosan” con llamadas amenazándola que le embargarán todos sus bienes.
Por su parte la jubilada cuestionó a los responsables del banco: “¿Dónde está la autorización, donde está mi firma? Quiero que me presenten los documentos porque he ido a sacar $10 mil y me han hecho firmar al menos diez formularios”.
Además relató que en dos oportunidades la llamaron haciéndose pasar por su hija, y que al manifestarle que no reconocía la voz le argumentaron que tenían el barbijo puesto. También quisieron sacarle dinero.
Esta semana se conocieron otras víctimas que a través de las redes acusaron a la misma entidad. Una de ellas fue Marcela Lucero, docente y vecina de Naschel, que sufrió el fraude en dos oportunidades y no puede recuperar la plata. También Martín Gómez, quien hizo un posteo en Facebook. “Me robaron de mi cuenta sueldo del Supervielle. Me sacaron 30 mil pesos, mucho o poco, pero eran míos y lo hicieron en dos veces. Reclamé, pero me trataron como si yo fuera tonto, preguntándome si le había dado la clave a alguien más, desligándose de toda responsabilidad”, dijo, y alertó: “Retiren su dinero para que duerman tranquilos. Hay muchos delincuentes sueltos”.
Otros empleados públicos provinciales han denunciado que cuando van a retirar sus sueldos no los tienen porque les descuentan un préstamo que nunca sacaron. A veces les devuelven la plata, y muchas otras veces como Rosa, queda en la nada.